http://media.neuquen.gov.ar/rtn/radio/playlist.m3u8
top of page

¿Lo conocés a Carlitos Gardel?



Hay miles de escritos sobre la figura de uno de los mayores exponentes del tango de la Argentina, en el mundo entero. El pelo peinado a la gomina, la sonrisa dibujada a la perfección y ese sombrero alado de costado que lo hacía tan seductor. De esos detalles y otros que, a través del cine, teatro, libros, se contaron, adoptamos a Carlitos para nosotros y para siempre.


Nació el 11 de diciembre de 1890 en Toulouse, Francia. Su nombre era Charles Romuald Gardès. Fue hijo de Berthe Gardès y de padre desconocido (aunque siempre se dijo que su progenitor era Paul Laserre). Una supuesta sobrina nieta de Gardel, Elena Irene Gardes publicó un libro donde afirma que el cantor fue hijo de un amor clandestino entre dos primos hermanos y que su progenitor era sacerdote. El libro se llama “Carlos Gardel y la raíz de mi genealogía”.


Doña Berta, madre soltera, y su pequeño hijo, huyendo de la reprobación social, llegaron a Buenos Aires en 1891 y se instalaron en una vieja casa de la calle Uruguay 162, se instalaron en la zona cercana al Mercado de Abasto, en el barrio porteño de Balvanera luego de que Carlitos terminara sus estudios primarios. Era hincha de Racing, pero su gran pasión deportiva era el Turf, más que el fútbol. Tuvo caballos de carrera, amigo del jockey Ireneo Leguisamo, que corría a su caballo Lunático. El letrista al que le grabó más temas fue su amigo Alfredo Le Pera (29 composiciones), y otros compositores favoritos fueron Celedonio Flores, Enrique Cadícamo y Francisco García Jiménez.


Carlitos comenzó a cantar aprendiendo de los tenores, incluso llegó a tomar clases de canto con Titta Cafiero Ruffo (famoso cantante de ópera italiano). Las primeras salidas como cantante fueron en los cafetines del Abasto, aproximadamente en 1910. En ese entonces, cambia su apellido por “Gardel” que sonaba mucho mejor.


A partir de ahí su vida fue arrolladora como su personalidad: le llovían propuestas y tentadoras ofertas. Conoció a Razzano, uruguayo de cuna, y armaron un dúo que luego se transformó en trío con Martino ya que Razzano tuvo problemas con la voz y dejó de participar de la dupla en el año 1925. Los primeros discos se grabaron por el sello Columbia y fueron doce canciones criollas las pioneras, la primera actuación en el exterior fue en Montevideo con su amigo Razzano y en un buque viajando a Brasil, lo escucha Enrico Caruso, famoso tenor de óperas quien se vuelve loco con el Carlitos, su voz y su interpretación.



Su discografía más importante la grabó con el sello Odeón y luego sobre el final con el sello RCA Victor. Participó en películas convertidas en cine de culto: mudas y sonoras además de realizar los primeros videos clips de la Argentina registrados en un número de diez conocidos. Grabó todo tipo de composición de su época: cifra, estilo, canción, vals criollo, vidala, gato patriótico, canción en tiempo de tango, zamba, tango, bambuco, tonada, cueca, vals, media cifra, fado, milonga, serenata, gato, chacarera, triunfo campero, pasillo, canción shimmy, canción zamba, fox shimmy, shimmy, camel trot, vidalita, fox trot, balada rusa, danza, marcha, pasodoble, canción criolla, canción campera, ranchera, canción fox trot, canción napolitana, tonada salteña, canción bambuco, rumba, pasillo colombiano, canción francesa, zamba canción y jota.

Las dos grabaciones más curiosas de la historia discográfica de Carlitos son “la marcha” y “la zamba”. La primera se llama “Adelante” y la grabó en 1925, la segunda, “Por el camino”, en 1928, (estuvieron en manos de coleccionistas hasta que se hicieron públicas).


Viajó y cantó por las ciudades más importantes del planeta. Francia se enamoró de su figura y su voz, y el 9 de julio de 1931, por gestiones del embajador argentino en Francia, Tomás Le Bretón, Gardel ofreció un concierto de canto en la célebre Universidad de la Sorbona, en París, además de filmar allí dos películas habladas en castellano. Resumir la historia de Carlitos es un intento imposible de cumplir, es demasiado abundante todo lo dicho, cantado, relatado, filmado grabado sobre este inolvidable cantor. Se dice que En 1908 conoció a José Betinotti y para homenajearlo, le cantó “Pobre mi madre querida”. El payador lo abrazó antes de que terminara , y le dijo: “Bravo, pibe, con vos se acabaron los payadores”. No se equivocó. Trascendió su muerte en la memoria de los más grandes compositores e intérpretes del tango. Nadie duda afirmar que Gardel canta cada día mejor.


En su homenaje, en la Argentina, se impuso el Dia Nacional del Tango el 11 de diciembre, fecha de nacimiento. La yapa lo recuerda y comparte.



Comentários


whatsapp-verde.png
vinilos, cd y cassetes.png
dez (350 x 290).gif

PELICULAS

MUSICA

LECTURA

bottom of page